Recorriendo Flandes

Gante

Típico foto de Gante, desde el puente de San Miguel 

Importante ciudad flamenca, ya en el siglo XVI era una de las más grandes de Europa, Gante es la ciudad con más edificios históricos. Situada a medio camino entre Brujas y Bruselas es una de las visitas obligadas para cualquier viajero por la zona.

Desde Brujas nos desplazamos una calurosa mañana de verano, un viaje de poco más de media hora para recorrer los 55 km que las separan.

Al llegar ya vemos que su tamaño es mucho mayor, hay una grandes avenidas y anchas calles. Dejamos el coche en el parking, al lado de la estación y nos desplazamos hasta el centro de la ciudad.

Nos dirigimos hacía el Graslei (Muelle de las Hierbas),  zona monumental rodeada de edificios históricos.

El muelle es un puerto medieval, animado a todas horas, con un impresionante despliegue de arquitectura antigua. Casas gremiales y almacenes que se alinean a lo largo del gran canal que lo atraviesa.

Cruzando el puente encontramos, prácticamente seguidas, la Iglesia de San Nicolás, la torre del campanario (Belfort) y la Catedral de San Bavón. Tres de los más importantes edificios que se pueden recorrer en Gante.

En esta Catedral fue bautizado en el año 1500 el emperador Carlos I, y en ella se puede ver el famoso tríptico de los hermanos Van Eyck “La Adoración del Cordero Místico”.

Al fondo, la iglesia de de San Nicolás

San Nicolás.- Una de la más antiguas de Gante, construida con una piedra azul grisácea extraída en la zona de Tournai. Durante la Edad Media se transportó esta piedra desde hasta Gante a través del rio Escalda.

Una vez recorrida esta zona, y repuestas las fuerzas en una de las terrazas que hay con estas impresionantes vistas, recorrimos durante unas horas las calles más céntricas de la ciudad.

Mucho y bien había oído y leído sobre Gante. Pero la verdad, es que exceptuando la zona del Graslei y los edificios históricos –ocupan una buena extensión y, sin duda, una maravilla-; el resto de la ciudad no nos dijo nada.

Para mi gusto, carece del encanto de Brujas. Los grandes canales que la cruzan no tienen el encanto –exceptuando el Muelle de las Hierbas- de los que habíamos conocido estos días en Amsterdam y en Brujas.

Las comparaciones no son buenas y para gustos…  Me queda la duda de no haberla recorrido  de noche, un momento en que todos  los grandes sitios ganan mucho.

Gante ya es una gran ciudad, con mucha gente, y una extensa zona comercial donde encontramos todo tipo de tiendas. Amplias calles y avenidas, muy animadas, de ellas nos llevamos el recuerdo y las mejores fotos, que aquí están publicadas. Tal vez las expectativas que traíamos antes de conocerla no se ajustaron a la realidad.

Aunque no lo parezca: una tienda de Mango.

Así que, cansados de caminar por Gante, al atardecer, subimos al tranvía y volvemos a buscar el coche. Regresamos a Brujas.